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CRÍTICA: Las aventuras de Dog Man (HBO Max) – absurdamente divertida

CRÍTICA: Las aventuras de Dog Man (HBO Max) – absurdamente divertida

Sebastian Zavala Kahn

Crítico de cine

Las aventuras de Dog Man” es una suerte de spin-off de “El Capitán Calzoncillos”, pero no es necesario haber visto aquella adaptación para entender la nueva película animada. De hecho, una de las mejores características del filme es que logra narrar una historia ridícula y entretenida con sorprendente economía, haciendo uso de un acelerado ritmo de edición y movimiento para atraer tanto a adultos como a niños. Lo que tenemos acá, pues, es un filme colorido que seguramente encantará a su público objetivo, pero que cuenta con suficientes referencias maduras para sus padres, tíos o hermanos mayores. Es la película familiar ideal, entonces, por más de que no se sienta, a falta de una mejor expresión, grandiosa.

Al comenzar “Las aventuras de Dog Man”, vemos al dúo del Oficial Knight y su perro Greg en medio de una persecución con un criminal. Lamentablemente, dicha situación culmina con una bomba explotando, y nuestros héroes siendo llevados al hospital. Es ahí donde las enfermeras, conscientes de que el humano tiene una cabeza inservible y el perro un cuerpo inservible, se dan cuenta de que solo hay una solución: combinar a ambos seres, usando la cabeza de Greg y el cuerpo de Knight, para formar a Dog Man.

Y es así, pues, que dicho personaje se convierte en el mejor oficial de la ciudad, usando los poderes y habilidades combinadas de humano y perro. Sin embargo, su vida personal no es igual de feliz que la profesional: la esposa de Knight lo dejó y puso a la venta su casa, lo cual obliga a Dog Man a encontrar un nuevo hogar (que es más grande por dentro que por fuera). Y aunque los arrestos parecen salir todos bien, eventualmente llega el némesis de nuestro protagonista: Petey (voz de Pete Davidson), el gato más maligno de todos, empecinado en conquistar el mundo. No importa cuántas veces Dog Man lo arreste, este siempre logra escapar de prisión, lo cual resulta en una secuencia particularmente divertida de escapes cada vez más absurdos.

Puede que en un inicio parezca que Petey va a ser el villano principal de “Las aventuras de Dog Man”, pero inesperadamente, este personaje termina obteniendo una subtrama propia y sorprendentemente interesante. Enfurecido, el gato se compra una máquina de clonación y la usa, lo cual resulta en la llegada de Li’l Petey (Lucas Hopkins Calderon), una versión más pequeña y menos maligna del villano. De hecho, su “hijo” es todo un angelito, lo cual molesta a Petey a más no poder. Y como no podría ser de otra forma, eventualmente también llega un villano verdaderamente malo (sin hijo putativo ni nada por el estilo) llamado Floppy (Ricky Gervais): un pececillo cyborg con poderes telekinéticos.

De forma similar a otras películas animadas de años recientes, “Las aventuras de Dog Man” maneja una estética colorida y atractiva, que mezcla elementos en 3D con otros en 2D, respetando al máximo el arte de los cuentos originales. Disfruté en particular de elementos como sobreimpresiones o burbujas de texto que se convierten en objetos tangibles con los que los personajes pueden interactuar, así como gags visuales que parecen haber sido incluidos principalmente para que los adultos se diviertan. “Las aventuras de Dog Man” es una película en exceso imaginativa, inspirada tanto en las historias originales de Dav Pilkey, como en otros filmes norteamericanos animados como “Spider-man en el Spider-verso”, o “Robot Salvaje”, también de Dreamworks.

No obstante, a diferencia de otros largometrajes de similar corte, “Las aventuras de Dog Man” se deleita en ser poco realista y caricaturesco. Esta cinta no intenta emular la realidad ni representar de forma verosímil ambientes o animales que podríamos encontrar en la vida real. Más bien, el filme entero opera bajo la “lógica de caricatura”, en donde los personajes pueden sobrevivir a todo tipo de sucesos peligrosos, y donde las leyes de la física o la biología son opcionales. El que nuestro protagonista sea una mezcla de humano y perro podría haber sido tratado como algo sacado de una historia de terror (los paralelos con “Robocop”, lo crean o no, no deben ser gratuitos), pero en el mundo de “Las aventuras de Dog Man”, no resulta en nada particularmente traumático.

En general, pues, “Las aventuras de Dog Man” se termina sintiendo como una experiencia alocada, colorida y frenética, llena de secuencias de acción vistosas y chistes bastante buenos. Destacan la aparición de un edificio que cobra vida (¿?), un par de persecuciones alucinantes, y las interacciones entre Dog Man y el Jefe de Policía (Lil Rel Howery), quien felizmente se aleja de ciertos estereotipos propios del subgénero policial. Y de los gags, disfruté del personaje que solo se dedica a decirle a la gente que “el mundo no es justo”, así como del robot que Petey construye y que al parecer es capaz de hacer de todo (¿y que por alguna razón se pone chanclas de metal…?).

“Las aventuras de Dog Man” parece haber sido construida específicamente para un público de poca paciencia, quizás más interesado en colores vivos y mucha acción, que en una narrativa compleja. Lo cual no quiere decir que la cinta no sea capaz de tocar algunos temas interesantes —consideren, sino, el conflicto interno de Petey que se desarrolla gracias a la llegada de su clon benigno e inocente. Pero en general, todo lo que “Las aventuras de Dog Man” parece querer hacer es entretener con una trama ridícula (a propósito), personajes arquetípicos y carismáticos, mucho humor exagerado. No esperaba mucho de la cinta, la verdad, pero gracias a lo mucho que hace en poco tiempo, terminó cautivándome.

Nota: Vi este film gracias a un screener cortesía de Universal Pictures Awards.

Crítica de Sebastián Zavala Kahn

Comunicador audiovisual y crítico de cine. Bachiller en Comunicación Audiovisual por la PUCP; Maestría en Artes de MetFilm School en Londres; miembro de la APRECI —Asociación de Prensa Cinematográfica—, la OFCS – Online Film Critics Society y la IFSC – International Film Society Critics, y crítico oficial de Rottentomatoes.com. Integra el staff de las webs de Nintendo Pe, Cinencuentro y Ventana Indiscreta. Maneja la cuenta de cine SebaZavaReviews desde el 2012. Cofundador de NoEsEnSerie.com y FotografíaCalato.com, y coautor del libro Videogames You Will Never Play, del colectivo Unseen64.